Agrupación: La Tempestad
Título del programa: «LONDRES: EL GUSTO ITALIANO. D. Scarlatti y F. Geminiani»
Guillermo Peñalver, traverso
Lorea Aranzasti, violín barroco
Antonio Clares, viola barroca
Guillermo Turina, violonchelo barroco
Jorge Muñoz, contrabajo barroco
Silvia Márquez Chulilla, clave y dirección
Domenico Scarlatti (1685-1750)
Sonata en sol menor K. 88 (arreglo: Silvia Márquez)
Grave – Andante Moderato – Allegro – Minuetto
Francesco Geminiani (1687-1762)
Sonata para violín en re menor, op. 4 n.º 4
Largo – Allegro – Grave – Allegro
Domenico Scarlatti
Sonata en sol mayor K. 91 (arreglo: Silvia Márquez)
Grave – Allegro – Grave – Allegro
Francesco Geminiani
Sonata en re mayor, op. 1 n.º 10 (orig. en mi mayor)
Adagio – Allegro – Adagio – Allegro
Domenico Scarlatti
Sonata en do menor K. 73 (arreglo: Silvia Márquez)
Allegro – Minuetto
Francesco Geminiani
La foresta incantata
Concerto grosso en si bemol mayor, op. 7 n.º6
I. Allegro moderato – Adagio – Andante – Andante
II. Grave e adagio – Presto
III. Affetuoso
IV. Adagio – Allegro moderato
V. Andante
VI. Adagio – Allegro assai – Adagio – Presto
En Roma, el joven Domenico Scarlartti asistía a las accademie poetico-musicali, encuentros musicales patrocinados por el Cardenal Ottoboni donde se reunían los mejores músicos que pasaban por la ciudad. Allí tuvo ocasión de conocer a virtuosos y compositores como Arcangelo Corelli o Thomas Roseingrave, y se vio compitiendo al teclado con su estricto contemporáneo Haendel. En definitiva, un exigente entorno social y cultural –en ocasiones muy competitivo– que quizás no encajaba con la personalidad de Domenico y que respondía más bien a las aspiraciones paternas.
Quizás ambas, personalidad y aspiraciones paternas, llevaron a Domenico Scarlatti al servicio de la reina María Bárbara de Braganza. Por fortuna, esta debió de ser muy consciente del valor de la colección que iba atesorando y que el genio continuaba creando. Es por ello que decide entre 1752 to 1757 hacer un providencial encargo: trece volúmenes de sonatas de Scarlatti fueron meticulosamente copiados en gran formato. Un tesoro que en 1835 fue adquirido por la Biblioteca Nazionale Marciana de Venecia. La ciudad de los canales que reflejan coloridas fachadas y de los interiores vestidos de Tintoretto, Tiziano y Veronés, alberga también joyas scarlattianas adornadas con sugerente tinta roja.
Imaginar cómo suena el énfasis rítmico de las sonatas de Scarlatti en otros instrumentos, más allá del clave u otros teclados, puede resultar una tentación difícil de vencer. Lo fue para nosotros y lo debió de ser, también, para aquellos que tuvieron en sus manos alguno de los manuscritos calientes, recién salidos del horno, en el siglo XVIII.
Las obras de Domenico Scarlatti, como las de numerosos músicos italianos, fueron pronto objeto de gran admiración en Inglaterra, donde los escenarios de los años 20 y 30 del siglo XVIII aplaudían la agilidad y potencia de famosos castrati como Carlo Broschi “Farinelli”, las rencillas entre las sopranos del momento (la Cuzzoni o la Bordoni) provocaban furor entre el público, y los teatros peleaban por las óperas de Nicola Porpora o por contar con Francesco Veracini como concertino. Thomas Roseingrave, que había difundido las primeras óperas de Scarlatti en Londres, publicó los Essercizi per gravicembalo (1738-1739), y Charles Avison sus 12 Concerti Grossi sobre sonatas de Scarlatti.
Prácticamente de la misma edad que Domenico, el violinista y compositor Francesco Geminiani –que había estudiado con Alessandro Scarlatti, padre de Domenico– se estableció en Londres, donde no sólo triunfó con sus concerti grossi y su música para violín, sino que publicó allí numerosos tratados para violín, clave, etc. Uno de ellos –A treatise of good taste in the art of musick, 1749– versaba sobre el «buen gusto» en música, ese gusto italiano que había acabado derrotando a la tradición inglesa… Italia estaba de moda.
La Tempestad
Creado en el año 2000 y bajo la dirección artística de Silvia Márquez Chulilla, La Tempestad es considerado por la crítica uno de los grupos de referencia en el ámbito de la interpretación historicista en España. “La precisión, finura y compenetración de sus intérpretes atrapan al oyente desde la primera nota”.
La “expresividad y fascinación” atribuida por la crítica a La Tempestad les ha llevado a las principales salas y festivales de música antigua: Auditorio Nacional, Teatro Real de Madrid, Fundación Juan March, Festival Musika-Música Bilbao, Festival Internacional de Santander, Festival de Música Española de Cádiz, Festival de Música Antigua de Aranjuez, Festival Internacional de Daroca, FeMÀS Sevilla, Quincena Musical de San Sebastián, Mayo Musical de Bolea (Huesca), Lugo, Santillana del Mar, II Ciclo de Música Sacra de Almería, Festival Pau Casals de El Vendrell, Ciclo de Música Antigua en la Real Capilla de Santa Isabel (Zaragoza), Ciclo de Cantatas del Ayuntamiento de Madrid, etc. Amplían paulatinamente su presencia en festivales internacionales (Italia, Holanda, Austria, Croacia, Panamá, Andorra), destacando su participación en el VII y VIII Festival Internacional de Música Renacentista y Barroca “Misiones de Chiquitos” en Bolivia; en el Encuentro Euro-boliviano de La Paz, en el III Festival de Música Antigua de Panamá o en el Festival Haydn de Eisenstadt.
Con especial predilección por la música de cámara, sus programas habituales incluyen compositores como J. S. Bach, G. F. Haendel, D. Scarlatti, F. Couperin, J. Ph. Rameau, C. P. E. Bach o J. Haydn, sin olvidar autores españoles como A. de Cabezón, D. Ortiz, L. de Narváez, A. Soler, J. Oliver y Astorga o M. Cavasza y dedicando una especial atención a la divulgación del patrimonio. En 2014 presentaron la integral de los conciertos a 2, 3 y 4 claves de J. S. Bach; en 2015 ofrecieron en el Auditorio Nacional de Madrid y en el Auditorio de León un programa dedicado a la música de oposiciones a la Capilla Real de Madrid, programa en el que se incluía el estreno en tiempos modernos del primer concierto español para clave y orquesta, de Manuel Narro, y el concierto para dos claves de G. B. Pergolesi (concierto grabado y retransmitido por RTVE). Pero además, La Tempestad busca la interacción con otras disciplinas artísticas, destacando en este campo la colaboración con actores como Antonio M. M., Compañía Ferroviaria, Compañía Nacional de Teatro Clásico y Núria Espert.
Tras las excelentes críticas obtenidas con Caro Dardo: Sopranos y castrati en el Londres de Farinelli (MMA 2007) y Carl Philipp Emanuel Bach: Música a tres (Arsis 2009), sus últimos trabajos discográficos representan el intenso trabajo del grupo en torno a los arreglos: la primera grabación mundial de las 12 Sinfonías de Londres de J. Haydn en el arreglo de J. P. Salomon (MMA 2012) –proyecto patrocinado por la Consejería de Cultura de la Región de Murcia y Címbalo Producciones– y Mozart Infrecuente (Arsis 2013), que incluye la Sinfonía “Júpiter” KV. 551 en arreglo propio. En octubre de 2017 lanzaron con el sello IBS Classical el CD Iberian Harpsichord Concertos, con los primeros conciertos escritos para clave en la Península Ibérica: el de Manuel Narro y el de José Palomino, junto al de dos claves de Giovanni B. Pergolesi. En 2017 lanzaron con el sello IBS Classical el CD Iberian Harpsichord Concertos y en 2018 Scarlatti: Venezia 1742 (IBS 2018), en el que presentan las sonatas para tiple y bajo continuo de D. Scarlatti en versión instrumental realizada por Silvia Márquez. Su último registro, Lidón/Brunetti (IBS 2019), descubre recuperaciones patrimoniales del último tercio del siglo XVIII en torno a la corte madrileña.
En noviembre de 2018 La Tempestad fue invitada para inaugurar los actos del Bicentenario del Museo del Prado con un concierto ideado en colaboración con el Instituto Complutense de Ciencias Musicales. El programa, con música del entorno de la fundación del museo, recuperaba música de los archivos de María Luisa de Borbón en Parma y del Palacio Real de Madrid, y suponía el estreno en tiempos modernos del primer concierto español para violonchelo, de Francisco Brunetti, y la primera sinfonía compuesta por una mujer: la propia María Luisa de Borbón.
Paralelamente a su actividad concertística, el grupo ha sido invitado a impartir cursos (Conservatorio Nacional de La Paz, Academia de Música Antigua de Gijón, Academia Barroca de la Universidad de Panamá, Orquesta de Jóvenes de la Región de Murcia, etc.), a participar en programas de impacto social (Orquesta Hombres Nuevos de Santa Cruz, en Bolivia o Festival Activo de Gijón, para enfermos de Alzheimer) o a colaborar con jóvenes formaciones como la Cammerata de Murcia. Asimismo, han impulsado y coordinado los cuatro primeros Ciclos “Murcia Músicas Históricas” y la I y II Feria y Encuentros Internacionales de Música Antigua GEMA (FEIMA), celebradas en Murcia en octubre de 2016 y en Zaragoza en diciembre de 2018.
La Tempestad, miembro fundador de GEMA (Asociación de Grupos Españoles de Música Antigua), recibe el apoyo del INAEM y del ICA Región de Murcia, y es desde el año 2012 Grupo Residente del Auditorio y Centro de Congresos “Víctor Villegas” de la Región de Murcia. Cuenta con el Premio Promúsico 2011 de la Asociación Promúsica. En 2015 se alzó con dos galardones en los I Premios GEMA a la Creatividad e Innovación en la Música Antigua, como Mejor Grupo Clasicismo y Mejor Dirección (Silvia Márquez), premios ambos revalidados en la IV edición (2018), a los que se suma el Premio Mejor Gerente (Marivic Martín) en la II edición. Asimismo, resultaron ganadores del Circuito Festclásica Música Antigua 2016. Su proyecto elconservatorio.es, que aúna música antigua y gastronomía en un formato cercano y divulgativo, fue becado por Factoría Cultural y obtuvo los premios Estrella de Levante y GEMA 2019 de Innovación en la Música Antigua. Recientemente acaban de obtener el galardón a la Mejor Labor de Difusión de la Música Clásica en la IV Edición de los Premios de la Música Región de Murcia (2020).
Fecha
Domingo, 17 de julio de 2022
Hora
21:30
Lugar
Castillo de Santa Ana
Agrupación: La Tempestad
Título del programa: «LONDRES: EL GUSTO ITALIANO. D. Scarlatti y F. Geminiani»
Guillermo Peñalver, traverso
Lorea Aranzasti, violín barroco
Antonio Clares, viola barroca
Guillermo Turina, violonchelo barroco
Jorge Muñoz, contrabajo barroco
Silvia Márquez Chulilla, clave y dirección
Domenico Scarlatti (1685-1750)
Sonata en sol menor K. 88 (arreglo: Silvia Márquez)
Grave – Andante Moderato – Allegro – Minuetto
Francesco Geminiani (1687-1762)
Sonata para violín en re menor, op. 4 n.º 4
Largo – Allegro – Grave – Allegro
Domenico Scarlatti
Sonata en sol mayor K. 91 (arreglo: Silvia Márquez)
Grave – Allegro – Grave – Allegro
Francesco Geminiani
Sonata en re mayor, op. 1 n.º 10 (orig. en mi mayor)
Adagio – Allegro – Adagio – Allegro
Domenico Scarlatti
Sonata en do menor K. 73 (arreglo: Silvia Márquez)
Allegro – Minuetto
Francesco Geminiani
La foresta incantata
Concerto grosso en si bemol mayor, op. 7 n.º6
I. Allegro moderato – Adagio – Andante – Andante
II. Grave e adagio – Presto
III. Affetuoso
IV. Adagio – Allegro moderato
V. Andante
VI. Adagio – Allegro assai – Adagio – Presto
En Roma, el joven Domenico Scarlartti asistía a las accademie poetico-musicali, encuentros musicales patrocinados por el Cardenal Ottoboni donde se reunían los mejores músicos que pasaban por la ciudad. Allí tuvo ocasión de conocer a virtuosos y compositores como Arcangelo Corelli o Thomas Roseingrave, y se vio compitiendo al teclado con su estricto contemporáneo Haendel. En definitiva, un exigente entorno social y cultural –en ocasiones muy competitivo– que quizás no encajaba con la personalidad de Domenico y que respondía más bien a las aspiraciones paternas.
Quizás ambas, personalidad y aspiraciones paternas, llevaron a Domenico Scarlatti al servicio de la reina María Bárbara de Braganza. Por fortuna, esta debió de ser muy consciente del valor de la colección que iba atesorando y que el genio continuaba creando. Es por ello que decide entre 1752 to 1757 hacer un providencial encargo: trece volúmenes de sonatas de Scarlatti fueron meticulosamente copiados en gran formato. Un tesoro que en 1835 fue adquirido por la Biblioteca Nazionale Marciana de Venecia. La ciudad de los canales que reflejan coloridas fachadas y de los interiores vestidos de Tintoretto, Tiziano y Veronés, alberga también joyas scarlattianas adornadas con sugerente tinta roja.
Imaginar cómo suena el énfasis rítmico de las sonatas de Scarlatti en otros instrumentos, más allá del clave u otros teclados, puede resultar una tentación difícil de vencer. Lo fue para nosotros y lo debió de ser, también, para aquellos que tuvieron en sus manos alguno de los manuscritos calientes, recién salidos del horno, en el siglo XVIII.
Las obras de Domenico Scarlatti, como las de numerosos músicos italianos, fueron pronto objeto de gran admiración en Inglaterra, donde los escenarios de los años 20 y 30 del siglo XVIII aplaudían la agilidad y potencia de famosos castrati como Carlo Broschi “Farinelli”, las rencillas entre las sopranos del momento (la Cuzzoni o la Bordoni) provocaban furor entre el público, y los teatros peleaban por las óperas de Nicola Porpora o por contar con Francesco Veracini como concertino. Thomas Roseingrave, que había difundido las primeras óperas de Scarlatti en Londres, publicó los Essercizi per gravicembalo (1738-1739), y Charles Avison sus 12 Concerti Grossi sobre sonatas de Scarlatti.
Prácticamente de la misma edad que Domenico, el violinista y compositor Francesco Geminiani –que había estudiado con Alessandro Scarlatti, padre de Domenico– se estableció en Londres, donde no sólo triunfó con sus concerti grossi y su música para violín, sino que publicó allí numerosos tratados para violín, clave, etc. Uno de ellos –A treatise of good taste in the art of musick, 1749– versaba sobre el «buen gusto» en música, ese gusto italiano que había acabado derrotando a la tradición inglesa… Italia estaba de moda.
La Tempestad
Creado en el año 2000 y bajo la dirección artística de Silvia Márquez Chulilla, La Tempestad es considerado por la crítica uno de los grupos de referencia en el ámbito de la interpretación historicista en España. “La precisión, finura y compenetración de sus intérpretes atrapan al oyente desde la primera nota”.
La “expresividad y fascinación” atribuida por la crítica a La Tempestad les ha llevado a las principales salas y festivales de música antigua: Auditorio Nacional, Teatro Real de Madrid, Fundación Juan March, Festival Musika-Música Bilbao, Festival Internacional de Santander, Festival de Música Española de Cádiz, Festival de Música Antigua de Aranjuez, Festival Internacional de Daroca, FeMÀS Sevilla, Quincena Musical de San Sebastián, Mayo Musical de Bolea (Huesca), Lugo, Santillana del Mar, II Ciclo de Música Sacra de Almería, Festival Pau Casals de El Vendrell, Ciclo de Música Antigua en la Real Capilla de Santa Isabel (Zaragoza), Ciclo de Cantatas del Ayuntamiento de Madrid, etc. Amplían paulatinamente su presencia en festivales internacionales (Italia, Holanda, Austria, Croacia, Panamá, Andorra), destacando su participación en el VII y VIII Festival Internacional de Música Renacentista y Barroca “Misiones de Chiquitos” en Bolivia; en el Encuentro Euro-boliviano de La Paz, en el III Festival de Música Antigua de Panamá o en el Festival Haydn de Eisenstadt.
Con especial predilección por la música de cámara, sus programas habituales incluyen compositores como J. S. Bach, G. F. Haendel, D. Scarlatti, F. Couperin, J. Ph. Rameau, C. P. E. Bach o J. Haydn, sin olvidar autores españoles como A. de Cabezón, D. Ortiz, L. de Narváez, A. Soler, J. Oliver y Astorga o M. Cavasza y dedicando una especial atención a la divulgación del patrimonio. En 2014 presentaron la integral de los conciertos a 2, 3 y 4 claves de J. S. Bach; en 2015 ofrecieron en el Auditorio Nacional de Madrid y en el Auditorio de León un programa dedicado a la música de oposiciones a la Capilla Real de Madrid, programa en el que se incluía el estreno en tiempos modernos del primer concierto español para clave y orquesta, de Manuel Narro, y el concierto para dos claves de G. B. Pergolesi (concierto grabado y retransmitido por RTVE). Pero además, La Tempestad busca la interacción con otras disciplinas artísticas, destacando en este campo la colaboración con actores como Antonio M. M., Compañía Ferroviaria, Compañía Nacional de Teatro Clásico y Núria Espert.
Tras las excelentes críticas obtenidas con Caro Dardo: Sopranos y castrati en el Londres de Farinelli (MMA 2007) y Carl Philipp Emanuel Bach: Música a tres (Arsis 2009), sus últimos trabajos discográficos representan el intenso trabajo del grupo en torno a los arreglos: la primera grabación mundial de las 12 Sinfonías de Londres de J. Haydn en el arreglo de J. P. Salomon (MMA 2012) –proyecto patrocinado por la Consejería de Cultura de la Región de Murcia y Címbalo Producciones– y Mozart Infrecuente (Arsis 2013), que incluye la Sinfonía “Júpiter” KV. 551 en arreglo propio. En octubre de 2017 lanzaron con el sello IBS Classical el CD Iberian Harpsichord Concertos, con los primeros conciertos escritos para clave en la Península Ibérica: el de Manuel Narro y el de José Palomino, junto al de dos claves de Giovanni B. Pergolesi. En 2017 lanzaron con el sello IBS Classical el CD Iberian Harpsichord Concertos y en 2018 Scarlatti: Venezia 1742 (IBS 2018), en el que presentan las sonatas para tiple y bajo continuo de D. Scarlatti en versión instrumental realizada por Silvia Márquez. Su último registro, Lidón/Brunetti (IBS 2019), descubre recuperaciones patrimoniales del último tercio del siglo XVIII en torno a la corte madrileña.
En noviembre de 2018 La Tempestad fue invitada para inaugurar los actos del Bicentenario del Museo del Prado con un concierto ideado en colaboración con el Instituto Complutense de Ciencias Musicales. El programa, con música del entorno de la fundación del museo, recuperaba música de los archivos de María Luisa de Borbón en Parma y del Palacio Real de Madrid, y suponía el estreno en tiempos modernos del primer concierto español para violonchelo, de Francisco Brunetti, y la primera sinfonía compuesta por una mujer: la propia María Luisa de Borbón.
Paralelamente a su actividad concertística, el grupo ha sido invitado a impartir cursos (Conservatorio Nacional de La Paz, Academia de Música Antigua de Gijón, Academia Barroca de la Universidad de Panamá, Orquesta de Jóvenes de la Región de Murcia, etc.), a participar en programas de impacto social (Orquesta Hombres Nuevos de Santa Cruz, en Bolivia o Festival Activo de Gijón, para enfermos de Alzheimer) o a colaborar con jóvenes formaciones como la Cammerata de Murcia. Asimismo, han impulsado y coordinado los cuatro primeros Ciclos “Murcia Músicas Históricas” y la I y II Feria y Encuentros Internacionales de Música Antigua GEMA (FEIMA), celebradas en Murcia en octubre de 2016 y en Zaragoza en diciembre de 2018.
La Tempestad, miembro fundador de GEMA (Asociación de Grupos Españoles de Música Antigua), recibe el apoyo del INAEM y del ICA Región de Murcia, y es desde el año 2012 Grupo Residente del Auditorio y Centro de Congresos “Víctor Villegas” de la Región de Murcia. Cuenta con el Premio Promúsico 2011 de la Asociación Promúsica. En 2015 se alzó con dos galardones en los I Premios GEMA a la Creatividad e Innovación en la Música Antigua, como Mejor Grupo Clasicismo y Mejor Dirección (Silvia Márquez), premios ambos revalidados en la IV edición (2018), a los que se suma el Premio Mejor Gerente (Marivic Martín) en la II edición. Asimismo, resultaron ganadores del Circuito Festclásica Música Antigua 2016. Su proyecto elconservatorio.es, que aúna música antigua y gastronomía en un formato cercano y divulgativo, fue becado por Factoría Cultural y obtuvo los premios Estrella de Levante y GEMA 2019 de Innovación en la Música Antigua. Recientemente acaban de obtener el galardón a la Mejor Labor de Difusión de la Música Clásica en la IV Edición de los Premios de la Música Región de Murcia (2020).
Fecha
Domingo, 17 de julio de 2022
Hora
21:30
Lugar
Castillo de Santa Ana
Entrada gratuita hasta completar aforo
